miércoles, 24 de abril de 2013

A nadie le viene mal una canción de amor

Quien ande por la vida con capuchas
y vista al corazón con armaduras
quien regale un beso desechable
con los labios en escaparates
con ternuras marchitadas
por no haber vivido nunca
uno de esos amores que llevan a la locura
indescifrable, sin poder mantener la postura
Sin tener argumentos para no tenerlos


entonces, a nadie le viene mal una canción de amor
de esas que te recuerdan que estás vivo
que te sacuden en cada suspiro,
te rasgan la piel y te tumban los nervios
de esas que se ajustan a cualquier proverbio
entonces la sangre te muerde las venas
colocando en tránsito un par de recuerdos a la cabeza


Quien entienda que el amor es para hacerlo
sin manuales, ni tendencias
que los motivos sobran cuando la cabeza
amotina las perezas de una razón que nace muerta
cuando se niega a confesarse con el corazón
que no hay peor mentira que la que uno se inventa
como método de defensa

entonces, a nadie le viene mal una canción de amor
de esas que te recuerdan que estás vivo
que te sacuden en cada suspiro,
te rasgan la piel y te tumban los nervios
de esas que se ajustan a cualquier proverbio
entonces la sangre te muerde las venas
colocando en tránsito un par de recuerdos a la cabeza



quien lleve una canción en los bolsillos
para encenderla en tu pelo
cuando tengas de roca el corazón
sentirás que a nadie le viene mal una canción de amor...

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